Bombardeo de Israel sobre Damasco agrava crisis
Ciudad de México, 17 de julio de 2025.- Un nuevo episodio de violencia estremeció Siria ayer, cuando aviones de combate israelíes lanzaron dos ataques contra el Ministerio de Defensa en Damasco, que provocó el colapso de parte del edificio y la muerte de al menos una persona. En tanto, 18 más resultaron heridas, según fuentes oficiales sirias. Esta ofensiva, la primera contra la capital desde mayo pasado, representa una escalada crítica en el ya deteriorado conflicto que involucra a combatientes drusos, tribus beduinas y el ejército sirio en el sur del país.
Por su parte, Israel reconoció la autoría del ataque y justificó la acción como un mensaje directo al presidente interino Ahmed al-Sharaa, con la advertencia de que no permitirá la presencia de tropas gubernamentales en regiones de mayoría drusa. Además del ministerio, fueron alcanzadas instalaciones cercanas al palacio presidencial. Oficiales israelíes acusaron a las fuerzas sirias de no evitar los ataques contra civiles drusos y las responsabilizaron de alimentar un clima de represión y violencia sectaria.
El enfrentamiento se produce tras días de choques armados en Sweida, donde más de 250 personas han muerto desde el inicio del conflicto el fin de semana, de acuerdo con el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. El estallido comenzó tras un incidente entre un miembro de una tribu beduina y un civil druso, que derivó en ataques cruzados y el ingreso del ejército sirio a la zona.
- El Dato: Un comunicado del gobierno sirio emitido ayer afirmó que los responsables de la anarquía en Sweida, ubicada en el suroeste del país, rendirían cuentas.
Los relatos provenientes de Sweida han conmocionado a la comunidad internacional. El martes pasado, hombres armados atacaron un salón de la familia Radwan y asesinaron a por lo menos 15 personas, incluidos civiles desarmados. Fotografías y videos difundidos por medios como The Guardian mostraron cuerpos esparcidos en el suelo, mientras familiares denunciaron que las ambulancias fueron impedidas de llegar por soldados que presuntamente querían dejar morir a los heridos por hemorragia.
Testimonios de residentes y de médicos forenses confirman disparos a quemarropa y signos de violencia extrema. En redes sociales, miembros de las fuerzas gubernamentales han compartido videos con discursos sectarios, uno de ellos burlándose mientras blandía un machete y pisoteaba imágenes de líderes drusos. Aunque el gobierno afirma actuar “dentro de las reglas del combate”, los hechos desmienten esa versión.
La comunidad drusa, de histórica presencia en Siria, ha sido objeto de persecuciones intermitentes y desconfía de las nuevas autoridades sirias tras la caída de Bashar al-Assad. A pesar de los intentos del presidente Sharaa por establecer un alto al fuego, figuras religiosas influyentes como el jeque Hikmat al-Hijri han desconocido los acuerdos, comprometiendo la estabilidad de la tregua anunciada el miércoles.
- 18 Sirios resultaron heridos por ataque a Ministerio
- 169 Personas murieron en la violencia de esta semana
Presión internacional. Mientras tanto, el Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá de forma extraordinaria este jueves para tratar la grave situación en Siria. El embajador israelí ante la ONU exigió que el organismo condene los crímenes cometidos contra civiles, mientras que Estados Unidos afirmó haber mediado con las partes en conflicto para frenar los enfrentamientos. “Las medidas acordadas deben implementarse esta noche”, advirtió el secretario de Estado, Marco Rubio.
Asimismo, la comunidad drusa en los Altos del Golán, territorio ocupado por Israel, también reaccionó. Decenas de drusos israelíes intentaron cruzar la frontera hacia Siria para ayudar a sus familiares. El primer ministro Benjamin Netanyahu instó a detener estas incursiones, con la advertencia de que quienes cruzan se arriesgan a ser asesinados o secuestrados. El ejército israelí ha intensificado su despliegue en la zona para evitar nuevas infiltraciones.
Testimonios desde Sweida reflejan el impacto humanitario. Habitantes permanecen encerrados, sin electricidad ni alimentos. Hay reportes de francotiradores disparando a civiles y comercios incendiados por hombres armados que profieren insultos étnicos. La cifra de muertos varía: mientras la Red Siria por los Derechos Humanos reporta 169 víctimas, otras fuentes estiman más de 300, incluidos niños y mujeres.
La violencia se produce en un contexto de inestabilidad posterior a la caída del régimen de Assad. Aunque las nuevas autoridades han prometido protección a las minorías, los hechos en Sweida refuerzan la desconfianza.
Con información de: La Razón