- El fenómeno astronómico alcanzará su punto máximo entre la noche del domingo y la madrugada del lunes, visible en el hemisferio norte
Ciudad de México, 18 de diciembre del 2025.- La última gran lluvia de meteoros del año, conocida como las Úrsidas, alcanzará en los próximos días su punto máximo, ofreciendo destellos luminosos en el cielo nocturno y durante la madrugada. Aunque se trata de un fenómeno de intensidad moderada en comparación con otras lluvias de meteoros, especialistas en astronomía señalan que representa una oportunidad atractiva para la observación.
Las lluvias de meteoros se producen cuando fragmentos de roca espacial ingresan a la atmósfera terrestre a gran velocidad y se desintegran, generando trazos luminosos conocidos popularmente como “estrellas fugaces”. Si bien estos meteoros pueden observarse en cualquier noche despejada, las lluvias más visibles ocurren cuando la Tierra atraviesa corrientes de restos dejados por cometas o asteroides.
De acuerdo con la Sociedad Estadounidense de Meteoros, las Úrsidas alcanzarán su mayor actividad desde la noche del domingo hasta la mañana del lunes, y podrán observarse hasta el 26 de diciembre en el hemisferio norte. Durante el pico, se estima una tasa de entre cinco y diez meteoros por hora, con la posibilidad de ráfagas que alcancen hasta 25 por hora.
La visibilidad del fenómeno depende de factores como la cantidad de escombros espaciales y la luminosidad de la Luna. En este caso, aunque las Úrsidas generan menos meteoros que otras lluvias como las Gemínidas, la fase de luna creciente será estrecha, por lo que no representará un obstáculo significativo para la observación.
Para apreciar este fenómeno no se requiere equipo especializado. Los expertos recomiendan abrigarse, alejarse de las luces urbanas y buscar cielos oscuros. Las Úrsidas se originan en el cometa 8P/Tuttle y, aunque los meteoros pueden aparecer en cualquier parte del cielo, sus trayectorias parecen irradiar desde un punto cercano a la constelación de la Osa Menor, conocida también como el Pequeño Cazo.
Asimismo, se aconseja evitar el uso de luces brillantes, como las de los teléfonos móviles, para permitir que la vista se adapte mejor a la oscuridad. “Cuanto más oscuro sea tu cielo, mejor será la lluvia”, señaló el astrónomo Peter Brown, de la Universidad Occidental de Canadá.
