Sigue pendiente programa de manejo de Área Natural Protegida donde está Calica
Ciudad de México, 16 de octubre de 2025.-Tras más de un año de la declaratoria de 53 mil hectáreas en Quintana Roo como Área Natural Protegida, donde están la mina y el puerto de Calica, el sitio carece de reglas para el uso y aprovechamiento de sus recursos.
Aun sin estas reglas, el Gobierno federal mantiene negociaciones con Calica, filial de la empresa estadounidense Vulcan Materials, para crear un “desarrollo turístico de bajo impacto” y también se analiza que el Estado compre los predios, como lo ha declarado la presidenta Claudia Sheinbaum en sus conferencias mañaneras.
El Área Natural Protegida “Felipe Carrillo Puerto” -en donde se encuentra la mina y el puerto de Calica- fue decretada como zona de protección el 23 de septiembre de 2024, días antes de concluir la administración de Andrés Manuel López Obrador. Esto ocurrió como estrategia del Gobierno federal para evitar que la minera siga explotando materiales de construcción.
De acuerdo con el decreto de creación de esta Área Natural Protegida, el programa de manejo debe publicarse conforme a la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, la cual dicta que las autoridades tienen un año a partir de la creación de cada área natural protegida para publicarlo.
“Es indispensable contar con el programa de manejo para conocer exactamente la forma en la que se protegerá el área. Además ahí, en el programa de manejo, se deben especificar las actividades que pueden realizarse y en qué partes del territorio”, explica a El Sol de México Gina Chacón, integrante del colectivo de organizaciones ambientalistas NOSSA México.
“Esta área fue decretada como Área de Protección de Flora y Fauna, lo que implica que hay especies de flora y fauna de importancia ecológica y cualquier actividad como el turismo podría alterar o impactar su efectiva conservación”, detalla la especialista.
Chacón expone que en los programas de manejo de cada Área Natural Protegida, la Semarnat define la capacidad de carga de cada zona. Es decir, la capacidad de uso de un ecosistema sin que resulte afectado, ni rebase su capacidad de recuperación a corto plazo.
Esta área fue decretada como Área de Protección de Flora y Fauna, lo que implica que hay especies de flora y fauna de importancia ecológica y cualquier actividad como el turismo podría alterar o impactar su efectiva conservación
Los programas de manejo se describen “las características físicas, biológicas, sociales y culturales del área natural protegida”, así cómo “las acciones a realizar a corto, mediano y largo plazo”, y la “forma en que se organizará la administración del área y los mecanismos de participación de los individuos y comunidades asentadas en la misma, así como de todas aquellas personas, instituciones, grupos y organizaciones sociales interesadas en su protección y aprovechamiento sustentable”, según la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente.
La secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Alicia Bárcena, dijo el 11 de octubre de 2024 que el programa de manejo, reglas de uso y aprovechamiento, estaría listo el 18 de febrero de 2025. No ocurrió y a la fecha esta zona natural todavía no cuenta con reglas para su uso.
El Sol de México consultó a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales y a la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, sobre la falta de reglas. Hasta el cierre de esta edición no obtuvo respuesta.
Con información de: OEM