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Pagos del Fobaproa, ineludibles hasta 2057: Hacienda

Ciudad de México, 12 de mayo del 2025.- Las obligaciones del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB), antes Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa), son deuda del Estado mexicano y en esos términos deben ser cumplidas. Si bien tienen origen en una historia tan truculenta de un rescate de deudas privadas que se transformaron en deudas públicas sin beneficio concreto, al final son obligaciones que de manera preliminar pesarán 62 años en el balance público, explicó Edgar Amador Zamora, secretario de Hacienda y Crédito Público.

En entrevista con La Jornada, el funcionario reconoció que las expectativas de crecimiento para la economía mexicana han sido afectadas por la pausa en que se encuentra la inversión, debido a la incertidumbre arancelaria inyectada por Estados Unidos. Si bien se está en un periodo de 90 días en que el gobierno de ese país, liderado por Donald Trump, ajusta su política comercial, México saldrá con una mejor posición relativa frente a otras economías, confió el secretario.

Si bien la realidad económica hace que la relación comercial con Estados Unidos tenga un peso importante, México tiene una política soberana en términos comerciales, sostuvo Amador Zamora. Por ello, no se cerrarán puertas con otros socios como China, Vietnam, Europa o Brasil en aras de privilegiar el vínculo con Norteamérica.

En cuanto a los frentes internos, el secretario sostuvo que al menos la mitad de las pérdidas reportadas por Petróleos Mexicanos (Pemex) son contables y no explican la operación de la compañía. Según su lectura, no se prevé un deterioro tan significativo que implique una situación crítica para la compañía. La estrategia de estabilizar la producción y enderezar la trayectoria de la plataforma petrolera va en dirección correcta. Estoy absolutamente convencido, puntualizó.

–¿Cuál es el sello que este gobierno quiere dejar en la economía?

–Creo que es muy claro. Para esta administración, para esta secretaría, los objetivos son los de este movimiento: mejorar la vida de las personas más necesitadas del país. Por el bien de todos, primero los pobres no nada más es una consigna política, es lo que nos guía en la Secretaría de Hacienda para poner al servicio de esta visión las capacidades técnicas en la elaboración de presupuestos, en las acciones que llevamos a cabo en banca de desarrollo, en la política de fomento. Nos queda muy claro que la visión de la presidenta (Claudia Sheinbaum Pardo) y de este movimiento es ayudar a que la pobreza en este país disminuya y creemos un México con más prosperidad y más bienestar. Así de claro.

–Sobre el Fobaproa, un tema que puso la Presidenta en el debate político, y usando sus palabras: más allá del ruido de los titulares, ¿hay posibilidades técnicas, reales, de refinanciar o hacer alguna intervención en la situación de estos bonos? ¿Hay algo que se pueda hacer o es ruido político?

–La instrucción que tenemos de la Presidenta es absoluta transparencia en todos los procesos de la política pública, y en aras de esa transparencia es muy importante mostrar qué pasó.

“Las obligaciones del IPAB son deuda pública, son deuda del Estado mexicano que deben ser cumplidas. ¿Cuál fue el origen? Esta historia tan complicada, tan truculenta de un rescate de deudas privadas que se transformaron en deudas públicas. Es un monto de gasto que no tuvo una correlación en empleo. ¿Cuántos empleos generó el gasto del Fobaproa?

“Entonces, es muy importante que identifiquemos esa parte. ¿Cómo se convirtieron esas deudas privadas en deuda pública? En este momento es deuda pública, es una obligación del Estado mexicano.

“Por fortuna, actualmente no representan una restricción demasiado pesada en el presupuesto (llegaron a representar más allá de 12 por ciento del gasto público). Estamos muy por debajo de eso. No es una variable que nos restrinja en este momento, pero es muy importante recordar cuál fue su origen.

“Por eso la utilidad de esta discusión, y reconozco mucho el trabajo del periódico de poner muy en claro cuál es el origen de esta deuda pública que debe ser tratada como cualquier otra. Y como cualquier otro pasivo público, es susceptible de refinanciamiento y de hacer ingeniería financiera con ella, como cualquier cete o bono M.

“¿Quiénes pueden acceder al financiamiento? Incluso en Cetes Directo puedes comprar bonos BPA (IPAB). En su momento sí fue un instrumento que generó muchos ingresos a los bancos. Hoy ha evolucionado, pero es muy importante reconocer, uno, cuál es el origen, y dos, la complejidad que tenemos ahorita como pasivo, como obligación pública.

–¿Entonces, se queda en una revisión histórica, pero no en una intervención técnica?

–Como cualquier otro pasivo, es susceptible de un refinanciamiento. Por eso va a ser muy importante la auditoría.

–Si hay opciones de refinanciamiento ¿de qué tipo serían?

–Vamos a analizar cuál es el perfil de pagos. En este momento el calendario nos lleva a la liquidación de estos pasivos hasta 2057. Vamos a ver que no presionen los presupuestos públicos en los siguientes años y ver la mezcla de soluciones para su atención. Pero en este momento, digamos, en términos financieros y legales, las reglas están muy claras y vamos a darle tratamiento de un pasivo público, como a cualquiera. Pero tenemos la obligación con ése, como con cualquier otro instrumento, de ver cuál es la mejor forma para optimizar el perfil.

–Los Precriterios se presentaron hace menos de dos meses; luego tuvimos el Informe de Finanzas Públicas y hasta ese momento no comentaba que probablemente podíamos crecer por debajo del rango de 1.5 a 2.3 por ciento. Si podemos poner un número, ¿Qué tanto está pesando la incertidumbre por el tema arancelario y comercial sobre las previsiones de crecimiento?

–Déjame contestarte de dos maneras. La primera: las variables que inciden en el producto interno bruto (PIB), todas están funcionando relativamente bien: consumo, tenemos desempleo en mínimos, la masa salarial en máximos, los ingresos en general del consumo van bastante bien, el gasto de gobierno –que es otro componente, como 11 por ciento– va sólido y el calendario de ejecución va conforme al programa.

“El otro componente es la balanza comercial: exportaciones menos importaciones. En marzo tuvimos superávit, lo que significa que es un factor a favor del crecimiento del PIB. ¿Cuál es la variable que está medio en pausa? La inversión. ¿Por qué? Porque es una decisión que va a largo plazo; necesita reglas claras.

“Ahora se están definiendo las nuevas reglas de la política comercial de nuestro principal socio (Estados Unidos). Entonces, hay un compás de espera en la inversión que deberá de ser temporal. Una vez que se definan las nuevas reglas, seguramente las empresas van a tomar decisiones.

“¿Y hacia dónde va la definición de reglas? Ahí hay que ver dos cosas. Una, ¿cuál va a ser la negociación bilateral de México con Estados Unidos? La Presidenta ha hecho un trabajo de primera calidad y nos ha asignado trabajos a los distintos equipos: Economía, cancillería, Hacienda, Agricultura, Seguridad.

“Esa es la primera parte. La segunda, muy importante, es cómo quedan nuestros principales competidores en el mercado de Estados Unidos. Si nosotros tenemos a final de cuentas un nivel arancelario, pero nuestros principales competidores tienen el triple, claramente la posición relativa será favorable a México. Y probablemente eso estaremos viendo en el corto plazo.

“Hay un cambio en la estructura de precios, tarifas y cuotas entre México y Estados Unidos, pero el resto de los países han sido afectados de una manera que hace que la posición relativa de México sea bastante competitiva.

–El próximo año tenemos la revisión del T-MEC. ¿Qué tanto podemos arrastrar a lo largo de todo el gobierno de Trump esta pausa en la inversión que mueve a la baja las perspectivas de crecimiento?

–Es un proceso. Estamos en esta ventana de 90 días. Las noticias son dinámicas, por ponerlo de alguna forma. De nuevo: puede ser que tengamos más o menos claridad respecto a nuestra posición, pero la posición relativa es muy importante. Por ejemplo, ¿cuál va a ser el arreglo al final entre China y Estados Unidos? En el mercado estadunidense los principales exportadores son México en primer lugar, China y Canadá.

México y Canadá sabemos más o menos las reglas, pero no sabemos las de nuestro principal competidor (China); ni las de los países del sureste asiático. Está evolucionando. Esa es la razón por la cual hemos sido muy cuidadosos para no producir un estimado puntual de crecimiento, sino que estamos estableciendo rangos que nos permitan capturar este proceso de definición de las estructuras.

–Se habló de 10 por ciento de incremento en las compras gubernamentales, pero estamos en un proceso de consolidación fiscal. ¿Cuál es el horizonte en el que estaríamos viendo resultados de este proyecto (para aumentar el PIB en 0.7 puntos porcentuales)?

–Una precisión: lo que queremos hacer es aumentar el contenido nacional de las compras gubernamentales (…) Un ejemplo muy ilustrativo son las medicinas. Si logramos elevar el contenido nacional de medicinas en 10 por ciento, eso va a ser suficiente para impulsar la construcción de manufactura de medicinas en el país de manera muy importante. Ese ejemplo vale para materiales de construcción, para alimentos, para todos los suministros del sector público.

“Elevar el contenido nacional a través sobre todo de mipymes, pequeña y mediana empresa. Ese es el objetivo de este acuerdo que firmamos con la Asociación de Bancos de México, elevar el contenido nacional ayudando a las pymes a insertarse en esa cadena de valor. Vamos a tener un impacto importante en el PIB.

–¿Qué tan dispuesto está México a modificar sus relaciones comerciales con otros países en aras de beneficiar su principal relación comercial, con Estados Unidos?

–México tiene una política soberana en términos comerciales. Por supuesto, la realidad económica impone un peso importante en la relación con Estados Unidos, pero en todo momento vamos a estar modulando conforme a los intereses comerciales del país. Lo que importa es privilegiar la economía del país para beneficiar a la población.

“Y la política comercial es una herramienta que ayuda no nada más al crecimiento, sino también, por ejemplo, a la estabilidad de precios, a la variedad en el consumo de los habitantes. Entonces, tenemos que cuidar la relación con otros países, otros socios comerciales, como China, Vietnam, Europa o Brasil. Son socios comerciales muy importantes para México.

Estuvo de visita el secretario de Hacienda de Brasil y vamos a tener una conversación muy intensa con la segunda economía más grande de América Latina. Ellos tienen muchos sectores que son muy importantes para nosotros en los que no competimos y podemos complementarlos de manera muy importante.

–Hablemos de Pemex. Tenemos las pérdidas del primer trimestre y se han usado más de la mitad de las aportaciones de la línea presupuestal. ¿Hay un tope en esta administración para Pemex, o recibirá todo lo que se pueda como en la administración pasada?

–Primero, en los resultados del último trimestre de 2024 es muy importante separar aquellos que tienen efectos de flujo, operativos, de los contables, que son reconocimientos de operaciones.

“De ese resultado, prácticamente la mitad fueron básicamente contables: revaluación cambiaria y cambio de activos a pasivos por las nuevas reglas contables. La mitad de ese resultado obedece a criterios contables que no tienen impacto en el flujo. Dicho eso, por supuesto que hay un peso importante en el flujo negativo de Pemex.

“Respecto al límite, por supuesto que hay un peso importante del resultado de Pemex, pero en ningún escenario estamos viendo que haya un deterioro tan significativo que implique una situación crítica para la compañía.

“Tanto la producción como la operación están estabilizadas y creo que el equipo de la Secretaría de Energía y el de Pemex han hecho un gran trabajo para estabilizar la producción y enderezar la trayectoria de la plataforma petrolera.

Creo, estoy absolutamente convencido, de que la estrategia va en la dirección correcta y no veo, ni en el futuro cercano ni hacia adelante, una situación en la que vaya a profundizarse la actual tendencia, sino al contrario, creo que estamos en una situación que va a ir mejorando apreciablemente en los siguientes meses.

Con información de: https://www.jornada.com.mx/

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