EU endurece discurso fronterizo y equipara al fentanilo con arma de guerra
- El mandatario estadunidense equipara al opioide con una amenaza estratégica y reconoce a tropas desplegadas en la franja limítrofe con México, en un acto de fuerte carga política
Washington y Nueva York, 16 de diciembre del 2025.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este martes una orden ejecutiva mediante la cual declaró al fentanilo como un “arma de destrucción masiva” y anunció la reactivación de una condecoración militar de origen histórico para distinguir a elementos de las fuerzas armadas asignados a la frontera con México, en el marco de su estrategia de seguridad y control migratorio.
Durante una ceremonia en la Casa Blanca, el mandatario sostuvo que el impacto del opioide sintético representa una amenaza mayor que la de cualquier artefacto bélico convencional y afirmó que provoca cientos de miles de muertes al año en su país. No obstante, estadísticas oficiales de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades sitúan las defunciones por sobredosis en cifras considerablemente menores.
La orden ejecutiva advierte que el fentanilo podría ser utilizado como un instrumento de ataques concentrados por actores hostiles organizados y responsabiliza a organizaciones criminales trasnacionales de su distribución en territorio estadunidense. Aunque el documento evita mencionar directamente a México, el presidente reiteró que amplios tramos de la frontera suroeste se encuentran bajo la influencia de los cárteles del narcotráfico.
Acompañado por integrantes de su gabinete de seguridad y altos mandos militares, Trump aseguró que su administración ha logrado frenar el ingreso de drogas por rutas marítimas y reiteró la posibilidad de emprender acciones directas contra traficantes fuera del territorio nacional, al considerar que representan una amenaza directa a la seguridad de Estados Unidos.
En ese contexto, el secretario de Guerra, Pete Hegseth, anunció la reactivación de la Medalla de Defensa de la Frontera Mexicana, una presea creada en 1918 para reconocer a tropas que participaron en operaciones militares contra fuerzas revolucionarias mexicanas en la segunda década del siglo XX. La condecoración será otorgada a efectivos que han prestado servicio en la frontera sur, donde, de acuerdo con el Pentágono, cerca de 25 mil militares podrían ser elegibles.
En la primera entrega, 13 elementos de las fuerzas armadas recibieron la medalla en un acto que combinó mensajes de reconocimiento institucional con una narrativa de respaldo político al presidente, quien defendió los resultados de su política fronteriza y afirmó que la zona limítrofe ha permanecido segura durante los últimos meses.
Finalmente, la Casa Blanca difundió un comunicado en el que aseguró que la actual administración ha restablecido el orden en la frontera con México, disuadido los cruces irregulares y reducido el impacto del crimen trasnacional, al tiempo que el mandatario atribuyó los problemas económicos persistentes a decisiones del gobierno anterior.