- A partir del 1° de enero se exigirá la separación en tres tipos de desechos; la meta es alcanzar 50% de eficiencia en el reciclaje
Ciudad de México, 08 de noviembre del 2026.— Con el objetivo de alcanzar un 50 por ciento de eficiencia en la separación de residuos, la secretaria de Medio Ambiente capitalina (Sedema), Julia Álvarez Icaza Ramírez, anunció que a partir del 1° de enero del próximo año los habitantes de la capital deberán clasificar sus desechos en tres categorías: inorgánicos reciclables, inorgánicos no reciclables y orgánicos.
Durante su comparecencia ante las comisiones de Preservación del Medio Ambiente y Cambio Climático, Bienestar Animal y Agenda 2030 del Congreso local, Álvarez Icaza explicó que entrará en vigor una nueva etapa de recolección diferenciada por días, en la cual los residuos orgánicos se recibirán los martes, jueves y sábados, mientras que los inorgánicos reciclables y no reciclables se recolectarán los lunes, miércoles, viernes y domingos.
“Si no hay separación, no habrá recolección”, advirtió la funcionaria, quien adelantó que la próxima semana iniciará una campaña masiva de información, apoyada por un “ejército de capacitadores” que acudirá a las escuelas para enseñar las prácticas correctas de separación de residuos.
Estrategias ambientales y proyectos en curso
Con motivo de la Copa Mundial de Futbol 2026, la Sedema trabaja en una estrategia para reducir el uso de plásticos y desechables, además de intervenir tres embarcaderos en la zona chinampera de Xochimilco —Nativitas, Cuemanco y Zacapa—, con el fin de mejorar las condiciones para prestadores de servicios y visitantes y fortalecer el turismo ambiental.
En su informe, Álvarez Icaza destacó que durante el periodo reciente se han recuperado más de dos millones de metros cuadrados de suelo verde, se atendieron 227 denuncias ambientales, se realizaron 447 recorridos de vigilancia preventiva y 344 visitas de inspección, que derivaron en la clausura de 215 obras y actividades ilegales.
Protección del “bosque de agua” y combate a la tala ilegal
La secretaria subrayó el uso de herramientas tecnológicas para la vigilancia territorial en el llamado bosque de agua, que abastece el 70 por ciento del recurso hídrico de la ciudad. Con un “cerco satelital” diseñado por la Sedema, se monitorean semanalmente mil 47 cuadrantes del suelo de conservación, detectando con precisión alteraciones del uso de suelo.
Estas labores se complementan con vuelos de drones sobre más de 14 mil hectáreas, que han permitido identificar asentamientos irregulares, escurrimientos, plagas, materiales de construcción y zonas de riesgo ambiental.
En el combate a la tala clandestina, la Sedema ha ejecutado 223 operativos, logrando el desmantelamiento de seis aserraderos ilegales, el aseguramiento de 668 metros cúbicos de madera, 106 metros cúbicos de tierra de monte, 40 vehículos y 50 herramientas. La funcionaria señaló que Topilejo, en Tlalpan, podría ser declarada zona libre de tala ilegal.
Reducción de emisiones contaminantes
En materia de calidad del aire, Álvarez Icaza informó que se ha logrado reducir de 11 a cinco las contingencias ambientales gracias a acciones de movilidad sustentable y control de emisiones. Destacó que se evitaron 550 toneladas de partículas PM10, 170 de PM2.5, además de 5 mil 700 toneladas de compuestos orgánicos volátiles y mil 250 de óxidos de nitrógeno.
Con estas acciones, el gobierno capitalino busca consolidar una gestión ambiental más eficiente y sostenible, enfocada en la protección del suelo de conservación, la reducción de residuos y la mejora en la calidad del aire.
