Asado de boda: El platillo de fiesta en SLP que nació durante la Revolución
Ciudad de México, 03 de agosto de 2025.- En San Luis Potosí, cuando se habla de fiesta de verdad, no puede faltar un guiso oscuro, espeso, fragante y profundamente sabroso: el asado de boda. Aunque su nombre lo vincula con las celebraciones matrimoniales, este platillo ha trascendido ese contexto para ocupar un lugar privilegiado en el recetario tradicional del estado.
La presencia de este platillo no puede faltar en reuniones familiares, fiestas patronales e incluso en algunos menús urbanos que rescatan lo mejor de la cocina regional.
El asado de boda, como muchos platillos mexicanos, nació en los ranchos y comunidades rurales. Se cocinaba en cazuelas de barro, con paciencia y sazón heredada y se servía a todo aquel que llegara a celebrar.
En San Luis Potosí, este platillo originalmente era una especie de adobo espeso hecho con chiles anchos, mulatos y pasillas, que se utilizaba para acompañar ingredientes locales como los cabuches y los nopales.
Con el tiempo, la receta se adaptó al gusto de las familias potosinas y comenzó a prepararse con carne de cerdo, dando lugar al guiso que hoy conocemos.
A diferencia de las versiones de otros estados como Zacatecas o Durango, el asado potosino destaca por su textura espesa, casi seca, y por la profundidad de sus sabores, en los que se perciben notas de chile seco, especias y en algunos casos, un toque dulce aportado por el chocolate o el piloncillo.
Con información de: El Universal