Envejece Latinoamérica; México también
Ciudad de México, 14 de julio del 2025.- América Latina ha disminuido su tasa de fecundidad y, por el contrario, en los últimos 50 años incrementó la población adulta mayor de manera similar al que Europa registró en dos siglos, reveló la Red de Institutos Universitarios Latinoamericanos.
A través del estudio “Cambios en las estructuras demográficas, una mirada a la realidad latinoamericana”, la red integrante del Centro de Estudios de Familia, Bioética y Sociedad de la Universidad Pontificia precisó que América Latina experimenta una transición acelerada, con una disminución en las tasas de natalidad y un aumento en la esperanza de vida.
“Se plantean así desafíos significativos para los sistemas de salud, la seguridad social y los mercados laborales”, afirma.
En el contexto del Día Mundial de la Población, el reporte detalla que América Latina y el Caribe están experimentando una transición demográfica reflejada por un proceso de envejecimiento acelerado.
De acuerdo con el informe presentado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL, 2022), la región pasó de ser una sociedad joven, a una adulta joven en 2021, por lo que se proyecta que para 2050 se convierta en una sociedad envejecida.
Este fenómeno se debe a una rápida transición demográfica, con un descenso de las tasas de fecundidad y mortalidad. De hecho, la región ha experimentado en medio siglo un envejecimiento poblacional similar al que Europa registró en dos siglos.
Natalidad y mortalidad en América Latina
La relación entre natalidad y mortalidad cercana al equilibrio indica una estabilización o estancamiento poblacional. A diferencia de países como Paraguay o Bolivia, donde la natalidad supera ampliamente a la mortalidad, en ciertos países de la región ya no hay crecimiento vegetativo significativo.
Esta situación, detalla la Red de Institutos Universitarios Latinoamericanos, demanda replantear modelos de desarrollo, financiamiento de sistemas previsionales y estrategias de sostenibilidad demográfica.
“Los datos proporcionados reflejan una tendencia regional hacia el envejecimiento, con diferentes ritmos y etapas entre los países. Contar con el índice de envejecimiento resulta fundamental para medir el envejecimiento de una población en la que nacen cada año menor cantidad de niños, y se vive cada vez más años”.
No obstante, al comparar la población de 65 años y más con la de O a 14 años, se obtiene una imagen clara de la estructura etaria de un país.
Relevar la edad mediana de cada país facilita contar con la tendencia poblacional. En el informe se observa que
En el caso de países como Uruguay, Chile, Brasil y Argentina, hay una clara tendencia hacia el envejecimiento, debido a que una parte importante de la población se concentra en edades más avanzadas.
Sin embargo, resulta relevante que este proceso demográfico sea abordado desde una perspectiva de derechos, tal como lo establecen los instrumentos internacionales, para garantizar una vida digna, saludable y participativa para las personas mayores, y para aprovechar las oportunidades que este cambio demográfico representa para la sociedad en su conjunto.
Transición demográfica
La Red de Institutos Universitarios Latinoamericanos consideró urgente considerar, en el marco de las políticas públicas de cada país, la necesidad de reestructurar sus sistemas de salud, previsionales y de protección social para atender en pocos años las demandas de una población cada vez más longeva.
Al respecto, son Uruguay, Argentina, Chile y Colombia quienes lideran este proceso regional de transición demográfica.
Por su parte, Paraguay y Bolivia, se destacan por contar con poblaciones de distintos grupos etarios más jóvenes. En el marco regional (e incluso internacional) les confiere una valiosa oportunidad, entendida como «bono demográfico», al contar con una alta proporción de personas activas, por sobre la proporción de personas dependientes.
Igualmente resulta importante reconsiderar que en ambos países, la esperanza de vida de 74 y 66,4 años respectivamente, muy por debajo del promedio de los demás países de la región.
Envejecimiento podría impulsar el desarrollo económico
El desarrollo económico y social de cada país podría impulsarse mientras se preparan para el futuro envejecimiento, pero siempre y cuando se cuenten con las políticas adecuadas de educación, salud y trabajo, detalló la Red de Institutos Universitarios Latinoamericanos
Estructuras familiares
Respecto a las estructuras familiares, precisó que también se han modificado, por lo que se observa un importante crecimiento de hogares unipersonales y una reducción de la cantidad de miembros en el hogar.
De acuerdo con la CEPAL (2024) el promedio de integrantes en el hogar es de 3.4 personas. Sin embargo hay países con un ratio aún menor, como Argentina, con un promedio de 2.9 personas por hogar (INDEC, 2022).
En este tenor, en América Latina se puede observar un marcado ascenso de la conformación de hogares multigeneracionales (con dos o más generaciones unidas por lazos familiares) en un promedio de 21.5%(CEPAL, 2024).
Es decir y con base en los datos estudiados, resulta relevante la disminución de la nupcialidad y con ello la estabilidad familiar asociada al matrimonio, no sólo por la baja en el número de uniones sino por el aumento de divorcios.
Por ello, la Red considera necesario profundizar las causas culturales y relacionales pero sobre todo en la afectación de los proyectos de vida a largo plazo.
“Es por eso que las nuevas políticas demográficas no solo deberán atender al grupo poblacional más añoso, sino que también, se plantea la necesidad urgente de establecer políticas de incentivos a la natalidad y la parentalidad, que valoricen el rol de madres y padres, que fortalezcan las relaciones familiares y que promuevan apoyos integrales para familias con necesidades diversas”.
Con información de: https://www.eleconomista.com.mx/