Donald Trump quiere tasas más bajas, la Fed probablemente permanecerá inamovible
04 de mayo del 2025.- El banco central estadounidense se reúne esta semana por tercera vez desde el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, en medio de un panorama económico revuelto y bajo los dardos del mandatario republicano.
La gran mayoría de los actores del mundo de las finanzas tiene pocas dudas sobre el resultado de la reunión de la Reserva Federal (Fed) prevista para el martes y el miércoles. Se prevé que la Fed deje las tasas de interés en el nivel en el que están desde diciembre, en una franja de 4.25% a 4.50%.
Sus responsables han manifestado que antes de tomar decisiones quieren calibrar cómo se comportará la economía ante la magnitud de la ofensiva proteccionista lanzada por el presidente estadounidense.
Aunque los indicadores económicos habituales muestran un creciente nerviosismo, los datos oficiales siguen contenidos (4,2% de desempleo en abril, 2,3% de inflación en marzo, ligeramente por encima del objetivo de 2% de la Fed).
El problema es lo que vendrá. En su última reunión, los responsables de la Fed rebajaron sus previsiones para la primera economía mundial, anticiparon menos crecimiento, más inflación y más desempleo.
No entrar en «pánico»
La guerra comercial entre Washington y Pekín se está traduciendo en exorbitantes aranceles aduaneros que están paralizando el comercio entre ambas potencias. Y la sobretasa mínima del 10% introducida por el mandatario republicano sobre los productos del resto del mundo también está encareciendo el día a día de las empresas y los hogares estadounidenses.
«Es complicado decir por el momento si la economía entrará en recesión, pero los aranceles al menos ralentizarán el crecimiento», dijo a la AFP Loretta Mester, expresidenta (2014-24) de la Fed de Cleveland (norte de Estados Unidos).
En este contexto, congelar las tasas es «lo correcto», incluso si ello implica recortarlas más rápidamente si hay un deterioro objetivo de la actividad, añadió Mester, que ahora enseña en la escuela de negocios Wharton de Pensilvania (este).
Si los responsables de la Fed «bajan las tasas ahora, significa que están preocupados, y que la situación empeorará», señaló Belinda Roman, profesora de economía en la Universidad St. Mary de San Antonio (Texas).
Según dijo Roman a la AFP, «si los mercados piensan que la Fed entra en pánico, entonces todo el mundo entrará en pánico».
«Cabeza fría»
Todo esto ocurre en un ambiente caldeado por las constantes agresiones de Trump al jefe de la Fed, Jerome Powell. A finales de abril dijo que «ya era hora» de que su mandato «llegara a su fin» y lo calificó de «gran perdedor», aunque más tarde aseguró que no tenía «ninguna intención» de despedirlo.
El presidente de la Fed descartó dejar su cargo de forma anticipada y a mediados de abril recordó que la independencia del banco central estadounidense está «garantizada por la ley».
Las críticas de Trump no han disminuido. La semana pasada, el republicano declaró a la prensa que «no es un gran fan» de Powell y repitió en mayúsculas en su red Truth Social que la institución debía bajar las tasas, jurando que «NO HABÍA INFLACIÓN».
A veces los jefes de Estado desaprueban públicamente la política monetaria, señaló Mester; «lo que es diferente esta vez es el grado en que» Trump «lo hace».
Sin embargo, la expresidenta de la Fed de Cleveland está convencida de que sus antiguos colegas seguirán tomando sus decisiones de forma independiente.
Los funcionarios de la Fed, dijo Roman, «tienen que ser capaces de mantener la calma, de mantener la cabeza fría a pesar de toda la presión y la agitación que les rodea».
Con información de: AFP