Tecnologia

Masaroca: tecnología mexicana con diversas aplicaciones

México, DF. 26 de junio de 2015 (Agencia Informativa Conacyt).- Patentada internacionalmente por Cuba, Rusia, Estados Unidos y Sudáfrica, las propiedades –en estado fresco– de los productos de la tecnología mexicana Masaroca se caracterizan por su facilidad de preparación (solo se requiere añadirles agua). Su consistencia es la de una masa, aunque sin que se ponga blanda o correosa con la humedad o el calor.

También carecen de revenimiento, es decir, no escurren, por lo que no hay desperdicio. Son autosustentables y, como la plastilina, poseen memoria dimensional en fresco. No requieren molde o cimbra, tienen una gran cohesión y adhesividad al sustrato mas no a la herramienta, y no son tóxicos. Su aplicación es fácil y se utiliza herramienta común.

En estado endurecido, los productos Masaroca tienen una alta resistencia estructural a la compresión, flexión, tensión y adherencia, explicó en entrevista el escultor e inventor de esta tecnología, Carlos Javier Fernández García.

Además, detalló que carecen de contracciones y expansiones, es decir, no se agrietan y no requieren juntas constructivas. Son impermeables, resistentes al fuego, a agentes externos y contaminantes.

Una trascendente labor que hasta el momento solamente se ha realizado en el estado de Veracruz –utilizando esta tecnología mexicana– es la rehabilitación de viviendas que el inventor Carlos Fernández refiere como marginales, (refiriéndose a casas ubicadas en zonas de alta marginación).

Este proyecto no representa ninguna ganancia para el escultor porque para este trabajo, él y la empresa Masaroca decidieron ceder todos los derechos que tienen por las patentes y su desarrollo.

.“Hemos rehabilitado 600 viviendas ‘marginales’ (sic) hechas originalmente con lámina, cartón o pedazos de madera, en el municipio de Perote y otros del estado de Veracruz, proveyéndolas de una cimentación, muros y techos similar a la dureza y resistencia de una piedra”, comentó.

Las estructuras ya existentes sirvieron de soporte porque las láminas o madera se reforzaron al recubrir los muros y techos con mallas de acero y Masaroca. Además, detalló que se les puso piso, ventanas y hasta tragaluces.

El escultor aseveró que la ventaja de Masaroca es que permite reutilizar los elementos estructurales de las viviendas y, en lugar de construir casas nuevas en zonas marginadas, se reconstruyen las que ya están.

“Estamos por iniciar pláticas con la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) y elaborando manuales técnicos, sociales, de organización y operación para poder continuar con este proyecto a nivel nacional”, dijo.

“A nivel arquitectura, Masaroca también provee una libertad de construcción que hasta ahora ningún material había conseguido porque, dada su consistencia, permite a los arquitectos lograr formas poco procedentes. Ejemplo de ello es la Gran Stupa para la Paz Mundial, un templo budista en Valle de Bravo”, añadió.

Botón volver arriba