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Charlas de taberna | Festival Nacional de Máscaras Danzantes; identidad y tradición | Por: Marcos H. Valerio

En un esfuerzo por fortalecer nuestra identidad mexicana y promover las ricas tradiciones que nos definen, el pueblo mágico de Coscomatepec de Bravo, en Veracruz, será nuevamente el epicentro de una de las fiestas culturales más vibrantes del país: el Festival Nacional de Máscaras Danzantes. Este evento, único en su tipo, reunirá a más de 1,500 danzantes de 14 estados y a 80 maestros mascareros, junto con artistas de países latinoamericanos como Colombia, Ecuador, Bolivia, Chile, Perú y Paraguay. Es una ventana al mundo que exhibe la riqueza cultural de México a través de las danzas tradicionales que hacen uso de máscaras, en lo que promete ser una experiencia visual y emocional que cautivará a miles de asistentes.

El director del festival, Manuel Álvarez Sánchez, ha subrayado que este evento no solo busca entretener, sino también preservar y dar visibilidad a las tradiciones mexicanas que, aunque arraigadas en pequeños pueblos y comunidades, reflejan el corazón cultural de nuestro país. Las máscaras, que históricamente han sido un símbolo de festividad y misterio en muchas culturas, aquí representan la identidad profunda de los pueblos que las han confeccionado por generaciones.

Lo que hace verdaderamente especial al Festival Nacional de Máscaras Danzantes es que no se trata únicamente de un espectáculo artístico, sino de un testimonio viviente de cómo las tradiciones populares, muchas veces transmitidas de padres a hijos, siguen formando parte esencial del tejido social.

Los danzantes, en su mayoría ciudadanos comunes que dedican tiempo y recursos a confeccionar trajes y máscaras elaboradas, traerán a las calles de Coscomatepec no solo su arte, sino también el alma de los carnavales y fiestas patronales que se celebran a lo largo y ancho de México.

Entre las actividades más destacadas se encuentra el Encuentro de Cartoneros de México, que contará con la participación de artesanos como el maestro Josué Hernández Lara, quienes mostrarán la destreza detrás de cada máscara y figura artesanal. Además, se han programado exposiciones, talleres y pláticas en las que los visitantes podrán conocer de cerca el trabajo de estos maestros del arte popular.

Una de las grandes sorpresas de este año es la presencia de la cantante, bailarina y actriz María de León, quien encabezará una cartelera de espectáculos que promete deleitar a todos los presentes. La participación de artistas de renombre añade un atractivo adicional, reforzando el carácter festivo y cultural del evento.

Este festival, que ya en su cuarta edición se perfila como uno de los eventos culturales más importantes del país, espera superar los 50 mil visitantes entre locales y extranjeros. Coscomatepec de Bravo, junto con sus pueblos vecinos como Córdova, Huatusco, Orizaba y Tomatlán, abrirá sus puertas con la legendaria hospitalidad veracruzana, brindando a los turistas una inmersión completa en la riqueza cultural de la región.

Cabe destacar que, el evento no solo revitaliza la economía local a través del turismo, sino que también deja una huella tangible en el acervo cultural del país. Los danzantes donarán un traje y una máscara, con un valor aproximado de 20 mil pesos, al futuro Museo de la Máscara, que se encuentra en construcción y que será un espacio dedicado a preservar y celebrar esta rica tradición.

El Festival Nacional de Máscaras Danzantes es mucho más que un evento; es un símbolo de cómo el patrimonio cultural de México sigue vivo, vibrante y listo para ser compartido con el mundo. En Coscomatepec de Bravo, la historia, el arte y la tradición se entrelazan para recordarnos quiénes somos y de dónde venimos.

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