México relanza el Estadio Azteca–Banorte con amistoso de alto nivel: Portugal será el invitado inaugural rumbo al Mundial 2026
Ciudad de México, 02 de diciembre del 2025.- El retorno del histórico Estadio Azteca, ahora renombrado Estadio Banorte, se perfila como un acto simbólico dentro de la estrategia nacional hacia el Mundial 2026, donde México funge como país anfitrión. La Federación Mexicana de Futbol (FMF) confirmó que el recinto abrirá sus puertas el 28 de marzo para recibir el duelo amistoso entre México y Portugal, el primero tras la remodelación que lo prepara para la justa mundialista.
Como parte de esta agenda de fortalecimiento internacional, la Selección Mexicana enfrentará el 31 de marzo a Bélgica en el Soldier Field de Chicago, un encuentro que también forma parte del calendario estratégico previo al Mundial.
La FMF destacó que estas fechas FIFA tienen como propósito medir al Tricolor ante selecciones de élite: Portugal ocupa el sexto lugar del ranking y Bélgica el octavo, lo que coloca ambos duelos dentro de los compromisos más exigentes del ciclo.
En el caso de Portugal, la expectativa creció con la posible presencia de Cristiano Ronaldo, quien tras cumplir una sanción impuesta por el Comité de Disciplina de la FIFA se mantiene elegible, siempre y cuando no reincida en conductas sancionables. Su participación podría convertirse en uno de los focos mediáticos de la reapertura del inmueble.
México y Portugal se han enfrentado en cinco ocasiones —tres triunfos para los lusos y dos empates— destacando el choque en el Mundial de Alemania 2006.
En cuanto al encuentro frente a Bélgica, se prevé la participación de figuras como Romelu Lukaku, Jérémy Doku, Kevin De Bruyne y Thibaut Courtois, lo que refuerza el carácter de alto calibre del compromiso. La rivalidad histórica con los belgas suma siete partidos, con saldo equilibrado: tres victorias, dos empates y dos derrotas para México. Además, ambas selecciones se han visto las caras en tres Copas del Mundo: México 1970, México 1986 y Francia 1998.
La reapertura del Estadio Banorte se proyecta así como un momento político-deportivo clave, no sólo para celebrar la modernización de uno de los recintos más emblemáticos del país, sino también para posicionar a México en el escenario internacional rumbo al Mundial 2026.