Política

Mensaje del secretario de Hacienda y Crédito Público, Édgar Amador Zamora, en el acto protocolario de entrega del Paquete Económico para el Ejercicio Fiscal 2026

Ciudad de México, 09 de septiembre de 2025.- SECRETARIO ÉDGAR AMADOR ZAMORA: Buenas noches, senadoras y senadores aquí presentes. Agradezco su generosa disposición para recibir a esta hora al equipo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para hacer entrega del Paquete Económico 2026.

Saludo con respeto a la senadora Laura Itzel Castillo, presidenta de la Mesa Directiva; al senador Adán Augusto López, creo que no se encuentra; al senador Miguel Ángel Yunes, presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público; y a las senadoras y senadores que nos hacen el honor de recibirnos, de ser nuestros anfitriones y de acompañarnos en esta entrega del Paquete Económico 2026.

Es un honor presentar ante esta Cámara el Paquete Económico 2026, de conformidad con el artículo 31, fracción III, de la Ley Orgánica de la Administración Pública, en relación con los artículos 73 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, 16 y 17 de la Ley de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria.

Los documentos que sometemos a su análisis, reflejan con claridad los principios de nuestro modelo de desarrollo, una política económica que impulsa el crecimiento, amplía derechos sociales y garantiza estabilidad macroeconómica, siempre con responsabilidad fiscal y en favor de una prosperidad compartida.

Los resultados de nuestro modelo de desarrollo ya son tangibles en las familias mexicanas. Muestra de ello es que entre el 2018 y 2024, 13.4 millones de personas dejaron atrás la pobreza y la tasa nacional de este indicador descendió a 29.6 por ciento, el nivel más bajo desde que se tiene registro.

Esto confirma que una política económica orientada a salvaguardar el bienestar de las y los mexicanos es la mejor ruta para fortalecer el desarrollo económico y social del país.

Este paquete llega en un momento en el que México ha sabido combinar estabilidad y crecimiento. Las finanzas públicas se mantienen sanas, con una trayectoria estable de la deuda y fundamentos macroeconómicos sólidos.

Si bien el entorno internacional aún presenta riesgos derivados de la incertidumbre y tensiones comerciales, también habrá oportunidades que debemos aprovechar con planeación y responsabilidad.

En este contexto, nuestro país ha mostrado resiliencia. La economía crece por encima de lo previsto por el consenso de los analistas, respaldada por salarios reales en aumento, un mercado laboral dinámico y una integración estratégica en el comercio internacional.

Por ello, estimamos que en 2026 la economía crecerá entre 1.8 y 2.8, con un punto medio en 2.3 por ciento, impulsado por inversión privada, consumo interno, dinamismo exportador y un marco fiscal que da certeza y estabilidad.

La iniciativa de Ley de Ingresos de la Federación que hoy presentamos, reafirma el compromiso con un México más justo y equitativo. Se trata de un marco de ingreso sólido y responsable, que permite financiar los programas sociales y la inversión productiva que garantizarán el bienestar de millones de familias.

Para 2026, se prevén ingresos totales por 8.7 billones de pesos, con la recaudación tributaria como eje central. Ello significa que el presupuesto se financiará principalmente a través de un sistema moderno y eficiente, que amplía la base de contribuyentes y fortalece la eficiencia recaudatoria.

Se proyecta un crecimiento real de 5.7 por ciento en la recaudación respecto a 2025, lo que llevará a los ingresos tributarios a un máximo histórico de 15.1 por ciento del PIB.

Este resultado será posible gracias a la modernización del marco fiscal y el fortalecimiento del Sistema de Administración Tributaria, apoyado en nuevas herramientas digitales y tecnológicas que simplifican trámites, facilitan el cumplimiento y la fiscalización.

Entre las medidas propuestas, destacan que no serán deducibles las cuotas pagadas al IPAB por parte de las instituciones de la banca múltiple destinados al pago de los pasivos del FOBAPROA.

Por otra parte, se concede un beneficio a las personas físicas y morales que retornen o ingresen recursos de procedencia lícita al país, con el objetivo de que dichos recursos sean invertidos en actividades productivas que coadyuven al crecimiento económico de México.

Por otro lado, se ampliará la base tributaria y se abordarán fines extrafiscales, mediante una serie de disposiciones que abonen a salvaguardar la salud física y mental de la población, al tiempo que se incorporan medidas de apoyo a diversos sectores para impulsar el desarrollo económico del país.

De igual forma, se revisará la situación fiscal de los extranjeros conocidos como “nómadas digitales”, para asegurar una contribución equitativa a la hacienda pública por parte del universo de talento que reside en México, de forma que sea sostenible la provisión de infraestructura y servicios públicos que ellos demandan.

La Ley de Ingresos también incluye medidas de salud pública con un enfoque preventivo.

A partir de 2026, se ajustará el IEPS aplicado a bebidas azucaradas y tabacos. Estas medidas buscan inducir hábitos más saludables, reducir la incidencia de enfermedades crónicas y al mismo tiempo contrarrestar los efectos presupuestales originados por el combate a las enfermedades generadas por el consumo de estos productos, destinando los recursos recaudados a fortalecer los sistemas de salud y prevención.

La experiencia internacional demuestra que este tipo de medidas cumplen el doble propósito de mejorar la salud pública y garantizar mayores recursos para fortalecer la prevención y ampliar la infraestructura de salud.

Sólo en lo que va del año, se han inaugurado ya 15 hospitales y, antes de que termine 2025, esa cifra llegará a 31 nuevas unidades. Así construimos un sistema de salud capaz de responder a las necesidades actuales y debe prepararse para los retos del futuro.

Se incluye también una actualización a la Ley Federal de Derechos, con el fin de que quienes hacen uso de los servicios públicos aprovechan recursos de la nación, contribuyan de forma proporcional a financiar su costo real. Con ello se corrigen rezagos acumulados durante años, todo bajo los principios de justicia contributiva, transparencia y sostenibilidad.

En materia de financiamiento, se continuará privilegiando el endeudamiento interno en moneda nacional a tasa fija y de largo plazo, con un énfasis creciente en instrumentos sostenibles.

El financiamiento externo se mantendrá como fuente complementaria para diversificar riesgos y apoyar proyectos de desarrollo económico y social.

El diseño de la Ley de Ingresos se hace con una visión de sostenibilidad, asegurando que el gasto público tenga fuentes estables de financiamiento.

Para 2026, se propone un déficit de 4.1 por ciento del PIB, menor a nuestra previsión de cierre modificada de 4.3 por ciento del PIB para 2025, y un nivel de deuda de 52.3; cifras prudentes que garantizan la continuidad de programas sociales e inversión estratégica, sin comprometer la estabilidad fiscal ni el crecimiento económico.

Señoras y señores senadores, esta Ley de Ingresos es una oportunidad para reforzar la estabilidad, modernizar nuestro sistema fiscal y garantizar que la prosperidad llegue a todos los sectores de la población, especialmente a quienes históricamente han sido excluidos, porque creemos firmemente que sólo construyendo desde abajo y con justicia social podremos alcanzar un país más equitativo y próspero, ya que, por el bien de todos, primero los pobres.

Reitero la plena disposición de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para mantener un diálogo abierto, constructivo y respetuoso, siempre en beneficio del pueblo de México.

Muchas gracias por su atención, por su disponibilidad y estamos a sus órdenes, presidenta.

SENADORA LAURA ITZEL CASTILLO JUÁREZ: Gracias.

Muchas gracias, secretario.

Con información de: Cámara de Diputados

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