En San Lázaro realizan conversatorio sobre el impacto de las masculinidades en las juventudes de México

Ciudad de México, 06 de diciembre de 2025.- En el marco de los 16 días de activismo contra la violencia hacia las mujeres, la Comisión de Igualdad de Género, que preside la diputada Anais Miriam Burgos Hernández (Morena), llevó a cabo el conversatorio “#Nohayexcusa: la machósfera y su impacto en la construcción de la masculinidad de las juventudes en México”.

El evento también fue impulsado por la Junta de Coordinación Política, Secretaría General y la Unidad para la Igualdad de Género de la Cámara de Diputados (UPIG).

Durante su intervención como moderadora, Tatiana Telles Calderón, directora general de la UPIG, mencionó que no hay excusa para la violencia de género y “no son bromas ni conductas típicas de chicos”. Agregó que las mujeres están ante el riesgo de que las nuevas tecnologías en lugar de ser el gran igualador, terminen por ensanchar y expandir las brechas y sesgos de género.

Recordó que, según datos del Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas, el 44 por ciento de las parlamentarias reciben amenazas de muerte o violencia sexual, y el 73 por ciento de las periodistas han sufrido agresiones en línea, cifras que evidencian que la violencia digital busca silenciar a las mujeres en la vida pública y constituye una amenaza directa a los derechos humanos.

El colaborador de GENDES, A.C, René López Pérez explicó que la manosfera es un término que se empezó a utilizar cuando se identificaron páginas de internet que presentaban discursos machistas y antifeministas que eran contrarios al ejercicio de los derechos de la mujer, que son impulsados por grupos de extrema derecha y que ahora se unifica a las nuevas tecnologías.

Aseguró que en la actualidad los hombres han tenido que redefinir los roles en las sociedades y ha faltado generar escenarios de cómo ser insertados en la nueva lógica de relaciones de igualdad. Resaltó que la igualdad puede abonar a una mejor sociedad o mejores relaciones.

A su vez, Fernando Atristain, coordinador de proyectos de la Unidad de Género en el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), refirió que México es el país número uno de incidencias más altas en violencia digital. “Casi la mitad de los mensajes que reciben mujeres políticas, periodistas, activistas y defensoras de derechos humanos son agresivos y cuando se trata del contexto preelectoral se intensifica aún más”, añadió.

Destacó que datos del Inegi evidencian que 10.6 millones de mujeres han sido víctimas de violencia digital, además, el diseño de las plataformas digitales funciona mediante sistemas algorítmicos que buscan maximizar el tiempo de las personas conectadas, a través de materiales que inviten a la polarización, los cuales, han amplificado los estereotipos sexistas.

Diana Koester, investigadora social del equipo de igualdad de género e inclusión social de ODI Global, aseguró que la expansión de la manosfera no es un fenómeno aislado, sino parte de una reacción más amplia frente al avance de los derechos de las mujeres. Cuestionó hasta qué punto esta situación junto con las redes sociales contribuyen a actitudes discriminatorias y sexistas entre jóvenes.

Comentó que las redes sociales influyen en normas de género e ideas sobre masculinidad entre hombres adolescentes mexicanos, y a pesar de que las experiencias en cada país son distintas, la manosfera es un fenómeno global y existen responsables políticos y tomadores de decisiones que han buscado soluciones en otros países, así como proyectos de la sociedad civil.

En tanto, la gerente de operaciones en Mexfam, Liliana Paola Flores Velázquez, señaló que existe una idea de los hombres presentados como víctimas ante un cambio cultural, estructural y social que se presenta frente al avance de los derechos de las mujeres, lo que se posiciona como una pérdida de poder que el hombre quisiera tener

Explicó que su trabajo con adolescentes de 15 a 19 años en seis estados del país le ha permitido reunir evidencia sobre las ideas que influyen en ellos, destacando discursos relacionados con el éxito económico, el estatus que otorga el dinero y el papel de proveedor, tendencias que también se reflejan en redes sociales.