Ven fallas de modelo educativo tras aplicación al vapor en sexenio pasado
Ciudad de México, 19 de julio de 2025.- Complicaciones en el aprendizaje matemático y en las habilidades de lectoescritura, además de consecuencias arrastradas de generaciones que iniciaron su formación académica durante la pandemia, muestran que los problemas que se advertían al inicio del nuevo modelo educativo planteado a finales del sexenio anterior, hoy son un escenario aún pendiente de resolver en las aulas, a dos años de implementado el nuevo esquema de enseñanza.
La integrante del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional (IPN) Alma Maldonado consideró que ya comienzan a verse los “efectos” del plan echado a andar al final del sexenio pasado, pero a pesar del tiempo que ha transcurrido, persiste falta de información por parte de las autoridades oficiales sobre cuál es la evaluación que éstas mismas tienen.
- El Dato: un estudio sobre la Nueva Escuela Mexicana señala que la autonomía y la ausencia total de directrices o regulaciones puede generar confusión entre maestros y alumnos.
“Yo creo que estamos viendo efectos de esta prisa y de esta aplicación tan al vapor que se hizo del nuevo modelo, de los libros de texto, porque cambiar un modelo no se hace de la noche a la mañana. Necesitamos más datos, más información de cuál ha sido el impacto en las escuelas. Todo lo que tenemos básicamente es en un plano anecdótico”, dijo.
- 23.4 millones de estudiantes salieron de vacaciones ayer
A esto se suman otros “problemas” que devienen de la pandemia de Covid-19, debido a que en los años de su impacto las y los pequeños que pasaron sus primeros años de vida en confinamiento ahora llegan a los primeros grados del sistema de enseñanza en primaria con problemas de motricidad, socialización y capacidad de atención, lo cual además asocian con la dependencia que muchos alumnos de las generaciones recientes tienen de los dispositivos electrónicos, como celulares y tabletas.
Naomi tiene menos de una década ejerciendo la carrera como maestra en los primeros años de primaria.
Una de las observaciones que destaca en su plantel en el Estado de México es que nota problemas de atención y movilidad entre sus alumnos, lo cual atribuye a que quienes llegaron en este ciclo corresponden a los niños que crecieron durante la emergencia sanitaria y, por lo tanto, no acudieron presencialmente a preescolar para aprender a manipular materiales como papel, a sujetar un lápiz o motivar su movilidad, ya que el escenario común durante esa época era que tenían que permanecer en casa, sin convivir con más personas y, preponderantemente, con un dispositivo móvil en mano.
- El Tip: El programa La Escuela es Nuestra superó los 25 mil millones de pesos en inversión, beneficiando a más de 76 mil escuelas.
“De por sí ya veíamos venir que al ser niños que todo el tiempo estuvieron en casa y que no fomentaron su convivencia, ya serían temas por trabajar con ellos, pero a esto hay que sumarle las nuevas tareas y responsabilidades que se han tenido con el nuevo modelo educativo.
“No es que éste nos impida ayudar a los niños para que se fortalezca lo que les hizo falta en su formación preescolar por la pandemia, sino que más bien termina por ser un cúmulo de responsabilidades en donde tenemos que buscar responder a lo urgente y esto termina por quitar tiempo para otras actividades que de por sí ya nos preocupan a los maestros de primaria, como lo son reforzar las matemáticas y la lectura, porque sabemos que no andamos bien”, declaró.
Jesús ha sido en el último lustro maestro en diversos grados de primaria y algo que advierte es una mayor necesidad de reforzar contenidos básicos que, en su consideración, han sido históricamente “un problema”, como son las matemáticas.
El docente mencionó que a pesar de que cumplen con lo que mandata el nuevo modelo de enseñanza, han terminado por “rescatar” la forma en que antes se enseñaba, de manera que, por ejemplo, en contenidos de matemáticas, él ha optado por basarse en los libros que hasta hace unos años eran los que se distribuían, con el fin de que sus alumnos no lleguen con “peores niveles” a la secundaria.
En este contexto, Alma Maldonado remarcó que ve necesaria la existencia de organismos como fue la extinta Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu), con el que se habría podido tener un análisis sobre los resultados de este nuevo modelo.
Antes de ser eliminada por medio de una reforma, esta comisión elaboró un estudio al respecto, cuyo contenido no es público, pues los resultados únicamente fueron entregados a la Secretaría de Educación Pública (SEP) bajo un acuerdo de confidencialidad.
En otro punto, advirtió que un área en la que es necesaria una atención urgente es la corrección de los libros, que hasta este último ciclo aún fueron entregados con errores señalados al inicio de su implementación.
Pero más allá de los errores encontrados, lo que dijo que genera más alarma es el descuido que se vio en estos materiales, por los contenidos básicos como matemáticas, lo cual se conjuga con falta de acompañamiento a los docentes, que debe darse más allá de las reuniones mensuales que se tienen.
“Ése sería todo el gran objetivo: mejorar los aprendizajes, formar mejor a los niños y las niñas y, bueno, con todo lo que vamos arrastrando de la pandemia más este cambio… Este modelo requeriría con seriedad una revisión urgente por personas que saben, por expertos en las áreas educativas, por ir viendo, además, las afectaciones en cada tipo y nivel educativo”, recalcó.
Con información de: La Razón