Opinión del Día

Paso a Desnivel

David Cárdenas

ELIAS NANDINO

 

Ansiedad 

Desesperación. 

Las venas se hacen cuerdas con todo y nudos. Son venas de grito ahogado 

Venas comprimidas. 

Letras que encuentran acomodo desesperanzado, escritas casi a martillazo limpio en una noche o muchas noches de insomnio. 

En el insomnio cuando el cuerpo cae en la cama, como cuerpo del delito, con su interior aprisionado 

Con el amor inapaciguado pese al dolor de haberlo encontrado 

“Porque, desde el asomo delirante de mis instintos ciegos, tu existencia era ya por mis ansias presentida” 

Así lo refleja en su poesía Elias Nandino. 

La vida lo nació el 19 de abril del año 1900 en Jalisco. 

Siendo un niño, declamaba en las fiestas. 

Llegó la revolución cristera y su familia se mudó a Guadalajara . 

Estudió ahí medicina. Luego emigró a la Ciudad de México, y continuó sus estudios. 

En la urbe conoció a José Vasconcelos quién le ofreció un trabajo, 

Su vocación poética lo llevó a publicar Allis Vivere. “Vivir para los demás”. 

Conoció a Xavier Villaurrutia quien lo adentró al mundo de la intelectualidad 

A los 30 años de edad se titula como Médico Cirujano, estuvo como Jefe de practicantes de 1929-1930, Jefe de Médicos Internos 1932-1950 en el Hospital Juárez, comparte estas actividades en el Sanatorio de la Secretaría de Industria y Comercio y en la Penitenciaría del Distrito Federal (Lecumberri) donde ejerció de 1935-1942.  

Fue médico de cabecera de varios artistas: Cantinflas, María Felix, Dolores del Río, María Izquierdo, Diego Rivera, Roberto Montenegro, Fernando Fernández, Tongolele y Frida Kahlo.  

En 1948 renuncia a sus cargos médicos oficiales, atendiendo a su clientela particular, diciendo que no escribiría más, pero “El poeta propone y la poesía dispone” y entonces escribió más. 

Fallece el 2 de octubre de 1993 en la ciudad de Guadalajara, sus restos mortales descansan en el Panteón Municipal de Cocula. 

 

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